martes, 22 de mayo de 2007

Anticronica sórdida de una azotea en la noche del viernes para amanecer el sabado (uff! que pinche titulo tan inutilmente largo)

Creo que como a las 5 de la mañana me comencé a convencer de que mis amigos (Usaré pseudonimos pa' no cabulearlos aqui) ya tenían sueño y yo comenzaba a sentir el frio previo al amanecer, ya estaba yo charlando con alguien en la jaula de la ropa para esa hora. Además el pinche DJ pacheco (no era su nombre, aunque sería muy buen nombre para un dj) ya no podía conectar sus oidos con la consola y las bocinas hacia tiempo que papeleaban horriblemente. La música electro-dark (que siguió al disco de Son Cubano que repitieron 3 veces y con interrupciones fatales) parecia invitarnos a irnos a la chingada. Bailé como trompo coqueteando con todas las que sonreían! 8D (habia una gordita muy guapa por cierto, que no se porqué se fue después de bailar con mi amigo J. creo que ¡Debí pedirle su correo!-) pero eso fue como a las 3 o 4 am, cuando todavia estaba un poco llena la azotea.
Antes de que el baile animara el ambiente el lugar estaba a reventar y seguía llegando gente, no todos de la ENAH. Se oía un poco de jazz y electronico a buen volumen, pero nada bailable. Fué chistoso cómo habian llegado los matemáticos uno a uno y luego luego a perrear a las chavas (fresitas muchas) de la ENAH. Como no iba yo en ese plan me di cuenta de muchas cosas ;D. Ya se había saturado para las 2 de la mañana, habia una fila horrible para ir al baño y yo ya había conocido un par de gentes muy buena onda cambiando de lugar y buscando donde quedarnos J., Edgr. y Yo.
En general las chavas no eran tan alivianadas como en biología y de hecho algunas se querían hacer las interesantes solo por ser extrangeras o cosas asi (que hueva) pero iba determinado a tomar la actitud de disfrutar el momento desde que llegamos. Por eso (creo) me agradó todo lo que ví: el fondo de la sala con ventanas a la calle (casi sin paredes y con posters psicodelicos), la cocina, el estudio (ahi estaban los Djs), el minipatio con el minibaño y una mesa que era mas bien tragaluz del nivel de abajo, la Jaula para tender (esta si me gustó deveras) llena de gente semi-bailando, el barandal de la azotea lleno de gente con un suspiro en el precipicio... Pero la entrada llena de suspenso fue determinante: una escalera de espiral blanca de 3 pisos llena de macetas, en la que no se veia mas que el escalon que pisabas pero que dejaba oir el amontonadero que te esperaba.
Cuando llegamos a la entrada de la casa había una horda de chavos queriendo no dar una coperación para el "proyecto educativo" y de no ser por una gran suerte del destino que nos hizo encontrar a alguien que nos dió la dirección correcta cuando buscabamos la fiesta, no hubieramos llegado. Máxime por que era media noche cuando nos bajabamos del taxi hartos de las fanfarronerías del maniatico que creía manejarlo.
(8
eso jue todo, amigos!

3 comentarios:

quique ruiz dijo...

Pa lotra invita, ¿no? Bueno, si hubiera ido a la fiesta que fuiste, no hubiera ido a la fiesta que me hice solito en mi cabeza: fui el sábado con Cuauhtémoc, un amigo, a la Folie Belge... Creo que si cuento la historia, sería una entrada de blog por larga, así que mejor la cuento en otro lado... Me la pasé degustando buenas cervezas y platiqué con medio mundo: Tania, la recepcionista, Carlos, uno de los dueños, Pablo, su hijo, con un belga o francés en francés, lo cual ya no recuerdo, con una chava que por un momento estuvo sola y con mi amigo. Al final cuando terminé mi última cerveza, arrojé la copa por cielos y terminó rota por la recepción.

quique ruiz dijo...

A ver si luego vamos, ¿no? Bueno, si me dejan volver a entrar.

Anónimo dijo...

Eso de la crónica invertida en principio es muy buena idea, está muy amena la manera de narrar y los comentarios entre paréntesis como parte de la mente de tu mente te dan tu estilacho propio.
Me gustó mucho la anticrónica y sobre todo el titulito :P